¡Hola! Seiiti Arata. Los objetivos audaces tienen algo especial. Son decisiones que llegan para revolucionar tu vida; para cambiar radicalmente las cosas, para que te conviertas prácticamente en una persona nueva.
Por ejemplo, cuando te haces una promesa a ti mismo y dices: “Ya nunca más voy a comer dulces. Voy a dejar de tomar refrescos. También voy a dejar de comer harina.” Ahí, te estás creando una meta audaz.
Es decir, son decisiones que implican algo más que «comer menos dulces», y es que cuando dices que nunca más vas a hacer tal cosa, te estas creando una meta audaz, que va a largo plazo. Es tal vez un poco irrealista, pero sin duda audaz.
Después de todo, estas comidas están a nuestro alrededor, en todas partes, especialmente en eventos y encuentros sociales, ¿no es así? Esto hace que el reto sea aun más difícil.
1. Entender el efecto de las acciones repetitivas.
Me gustaría contarte una cosa: lo que nos engorda no es esa rebanada de pastel en el aniversario de la Tía Esmeralda. El estar fuera de forma es el resultado de acciones repetitivas. Es el resultado de la mala alimentación y falta de ejercicio por días, meses y años.
Cuando te pones la mano en el corazón y dices que vas a estudiar todo el día, que vas a levantarte de la cama a las seis de la mañana y que no vas a parar de estudiar hasta la medianoche, estas creando un objetivo audaz. No es fácil conseguir y mantener la concentración durante tanto tiempo. Sin momentos programados de reposo y descanso, tu desempeño estudiando va a disminuir considerablemente a lo largo del día.
Lo que va a hacer la diferencia en la calidad de tu aprendizaje, no es un día intensivo de estudio. Lo que va a marcar la diferencia es la construcción de un hábito consistente de estudios.
Por medio de la repetición y de la constancia tu cerebro se va a ir acostumbrando a establecer y fortalecer la asociación entre las diferentes ideas y conceptos que estás intentando aprender.
Por supuesto, esta audacia tiene un valor importante. La audacia nos motiva, nos inspira y nos ayuda a hacernos una visión del potencial que poseemos y de lo maravilloso que puede ser nuestro futuro. Todo esto juega un papel muy importante para poder cumplir nuestras metas.
Y necesitamos tener todo esto bien claro para no dejarnos llevar por esa imagen idealizada de los resultados rápidos, que está muy de moda en la actualidad.
Es importante tener en cuenta que, si queremos construir algo sólido, esto implica un esfuerzo en ocasiones tedioso y repetitivo. Pero con el paso del tiempo este sacrificio comenzará a rendir sus frutos y podrás disfrutar de ellos.
Buena parte de la evolución que tendremos en nuestra calidad de vida ocurre en un período de tiempo que llamaremos “período de estancamiento”, y mediante la práctica y el tiempo obtendremos resultados.
En este período de estancamiento, las cosas parecen suspendidas en el tiempo. Parece que no estamos evolucionando, que estamos haciendo lo mismo siempre y no salimos del mismo lugar. Puede parecer incluso que no estamos logrando nada. Pero no te desesperes, es en ese tiempo que estamos consolidando nuestras habilidades y obteniendo los recursos necesarios para mejorar como personas. Te recomiendo que le eches un vistazo a nuestro video sobre “maestría” que aparece en el siguiente enlace.
Cuidado con las trampas de la sociedad de consumo.
En todos lados encontramos promesas de riqueza rápida o de resultados inmediatos. Existe cierto atractivo en esta filosofía de disfrutar ahora y pagar después, o, mejor dicho, endeudarse ahora y pagar la deuda después.
De una forma muy sutil, nos venden la idea de trabajos exóticos y divertidos, como un ejecutivo que viaja por el mundo. No nos muestran aquellas partes aburridas, y sin glamour: y que son necesarias para construir buenos hábitos, como lo que hace el obrero.
Entiende que no existe crecimiento sin un período de estancamiento. Lo que necesitarás es un sistema que te permita sentirte cómodo en este momento de “estancamiento”, que te ayude a sentir placer en la práctica constante, y evitar caer en la frustración. Es decir, para que el hábito se vuelva realmente parte de tu vida, ¿entiendes?
Las iniciativas motivadas sólo por el impulso de la audacia difícilmente tendrán continuidad. Es lo que les pasa a muchos: sienten el chispazo y comienzan a hacer algo, pero el ímpetu decae y terminan dejando su proyecto inconcluso.
Sólo tuvieron la euforia del comienzo, el entusiasmo del principiante, pero no supieron cómo convertirlo en algo más grande debido a que no tenían este hábito de la perseverancia y la consistencia.
Después de pasar el período de estancamiento, tendremos un nuevo momento de crecimiento y cosecharemos resultados. Y de ahí vamos a encontrar una serie de nuevas dificultades, las cuales necesitaremos afrontar durante el siguiente período.
Te daré dos consejos para que puedas mantener el equilibrio necesario para alcanzar tus objetivos.
Primer consejo: prestar atención constantemente al nivel de dificultad de nuestro plan.
No querrás hacer algo que resulte muy simple y que al final terminará aburriéndote, pero tampoco querrás hacer algo tan difícil que te terminará frustrándote y haciendo que te des por vencido.
Cuando estés haciendo algo, pregúntate a ti mismo, ¿conseguí alcanzar mi objetivo? Si la respuesta es no, tal vez te convenga hacer algo más simple la próxima vez. Si la respuesta es sí, y alcanzaste tu objetivo, sería conveniente que, para tu próximo proyecto, subas un poco de nivel e intentes algo más difícil.
Lo ideal es que con cada “sesión de actividad” sientas un ligero aumento en la dificultad, lo que indicará que estás progresando, y así seguirás creciendo y mejorando.
Por ejemplo, si estás intentando aprender mandarín y ya puedes escribir perfectamente todos los ideogramas que ya habías practicando, es mejor empezar a practicar otros nuevos que aún no domines, de lo contrario estarás desperdiciando tu tiempo haciendo algo que ya dominas bien y no te deja nada nuevo. Así, pues, debes ir escalando en tu aprendizaje. Sin embargo, si al subir de nivel no consigues hacer los nuevos ideogramas, tal vez fue porque disto un salto muy grande y lo mejor sería dar unos cuantos pasos hacia atrás. El proceso debe ser gradual, y aumentar el nivel de poco en poco.
Segundo consejo: conocer personas que ya han caminado por el camino que estás recorriendo.
Muchas de las dificultades que estas enfrentando, ya han sido superadas por otras personas que ahora poseen ese conocimiento, tanto técnico como emocional.
Podrías recibir valiosos consejos de cómo superar y hacer frente a esas dificultades. Sólo con el hecho de saber que no eres el único que ha pasado por eso ya es muy reconfortante.
Este es uno de los motivos por los que me da mucha alegría grabar los vídeos en YouTube; en el canal de Arata Academy tenemos videos que cubren una gran variedad de temas referentes al crecimiento personal y profesional.
Algunos de nuestros videos son extremadamente básicos, otros son más avanzados. Cuando estás viendo uno de los videos más sencillos, y ves que hay otras personas con las mismas dudas que tú, te das cuenta de que no está solo y de que tu problema o duda no era tan básico después de todo.
Así evitas la autocrítica y la vergüenza que muchas veces sentimos por tener preguntas aparentemente “absurdas”. Recuerda que todo el mundo empieza desde cero; nadie nace sabiéndolo todo.
A pesar de todas las ventajas que nos puede brindar el internet, debemos tener cuidado y no compararnos con otras personas que se encuentran en un nivel más avanzado, ya que no se sabe cuánto tiempo y esfuerzo estas personas han dedicado para llegar a donde están.
Aprovecha el entusiasmo y la audacia para pensar en grandes objetivos. Pero ten en mente que no puedes depender solamente de ese entusiasmo para realizar tus planes, también es necesario desarrollar el hábito de la persistencia y perseverancia para lograr una práctica consistente.
Al momento de llevar a cabo tus planes y sesiones de prácticas, cuyo fin es perfeccionar tus habilidades, está atento de encontrarte en el nivel de dificultad adecuado que te permita mejorar para conseguir los resultados. Ni muy fácil, ni muy difícil.
Siempre que sea posible, relaciónate con personas más experimentadas, escuchar sus consejos te podrá ahorrar tiempo y también te dará un cierto confort emocional para que no desistas.
Puedes contar conmigo y con todo el equipo de Arata Academy.
Hoy te quiero proponer algo diferente. Quiero que visites nuestra página de contacto y nos escribas. Quiero que nos digas cuáles son tus sueños, cuáles son tus dificultades, y qué metas quieres alcanzar.
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