¡Hola! Seiiti Arata. Nuestro trabajo es más gratificante cuando sentimos que estamos contribuyendo a algo más grande. Algo que tiene un impacto positivo a nuestro alrededor.
Cuando nuestro trabajo trae beneficios para la sociedad en general, nos sentimos bien y somos más felices.
1. Hacer lo que amas hacer
Si recibes orientación profesional de amigos y muchos autores de autoayuda, probablemente has escuchado la sugerencia de hacer lo que amas. Sinceramente, creo que es mejor amar lo que hacemos, pero eso es una conversación para otro video.
Hacer lo que amas es una idea simple, emocionante, pero es más fácil decirlo que hacerlo. E invita a una buena pregunta: ¿qué es exactamente lo que amas hacer?
Vamos a tomarnos algo de tiempo para pensar en lo que te pone en un estado de flujo.
2. Experimentar un estado de flujo
En el video anterior reconocimos que ni el dinero ni el reconocimiento trae la felicidad, ve ese vídeo, para que puedas entender mejor lo que vamos a presentar aquí como el «estado de flujo». El flujo es un estado de enfoque total y de concentración que te hace estar tan inmerso y absorto en la actividad que se te olvida todo lo demás.
Experimentas este sentido de flujo mientras que haces en una actividad que te gusta, algo que da satisfacción por sí mismo, independientemente del dinero, independientemente de la admiración. Es una motivación intrínseca.
La satisfacción en el trabajo también requiere de un cierto grado de autonomía. Necesitas la libertad para utilizar tu potencial creativo y de tomar tus propias decisiones.
Si estás atascado en un trabajo donde no tienes ninguna oportunidad de experimentar ese estado de flujo, pues puede ser el momento de considerar un cambio.
3. Buscando la libertad
Hay dos maneras de lograr una mayor libertad en el trabajo.
La primera es a través del autoempleo y la iniciativa empresarial. Esto, por supuesto, tiene sus pros y sus contras.
El trabajo por cuenta propia aumenta en gran medida los retos, ya que no tienes los supervisores, estructuras, normas internas y varios procedimientos documentados. Sí, la autonomía trae la libertad, pero también viene con mayores riesgos financieros y más horas, incluyendo el trabajo hasta altas horas de la noche o el fin de semana. Sin vacaciones pagadas. El trabajador por cuenta propia está en por sí mismo.
Una segunda opción es encontrar la libertad fuera de la oficina, trabajando menos. En muchas oficinas ahora hay una tendencia a permitir que los empleados trabajen un poco menos y tengan una carrera más lenta, recibiendo menos dinero que otros que estén compitiendo por los puestos más altos. Los que eligen este camino tienen que hacer algunos ajustes financieros y reducir los costos, pero puede valer la pena. ¿Cuánto vale para ti dedicar tiempo para centrarse en lo que realmente quieres?
4. Un trabajo que nos llene
Tómate el tiempo para reflexionar sobre qué tipo de trabajo te gustaría.
Para empezar, piensa en tu carrera hasta el momento. ¿Cuáles son las calificaciones y habilidades que has desarrollado? ¿Y qué fue lo que te motivó a hacer esto? Ahora vamos a empezar a mirar hacia adelante.
Ve el vídeo titulado Encontrando un propósito en la vida para ayudarte en este proceso.
En esta reflexión, ten la audacia de pensar libremente. ¡Es sólo un ejercicio creativo! Si pudieras seguir cualquier camino en tu carrera, ¿cuál sería?
5. Aprender haciendo
Tal vez has leído algunos consejos para planificar tu carrera en gran detalle. Hay un problema con este enfoque: la planificación casi nunca funciona porque no somos muy buenos en la predicción del futuro.
Un enfoque mucho más eficaz consiste en «actuar primero y pensar en el camino». Es mejor experimentar con diferentes situaciones, múltiples actividades y diferentes entornos de trabajo, que perder esas horas en el mundo de la imaginación a medida que buscas esa posición perfecta.
¿Cómo hacemos esto? ¿Qué tal el voluntariado, que es una gran manera de tener una experiencia práctica a corto plazo? O pídele a un colega observar su trabajo si estás interesado en aprender más sobre lo que hace. Esto es muy común y se llama «observación de profesionales», lo que significa que, literalmente, sigues a la persona durante la jornada laboral.
Es una forma muy valiosa de aprender lo que otros hacen y comparar cómo esa experiencia coincide con tu versión idealizada de su trabajo.
Otra forma de aprender haciendo sin comprometer demasiado tiempo es hacer la actividad sólo los fines de semana en lugar de a tiempo completo. Si te das cuenta de que el trabajo es tan satisfactorio como era de esperar, puedes aumentar gradualmente el tiempo que dedicas a ello y hacer una transición gradual.
Dejemos la idea de una planificación meticulosa de lado. Si la situación actual en la que estás no te llena, tienes que probar cosas nuevas, asumir riesgos y aprender desde la experiencia.
Nunca habrá un momento perfecto para hacer la transición, ya que es importante reducir nuestros gastos financieros para ganar más libertad.
La semana que viene vamos a compartir algunos consejos excelentes para disminuir nuestros compromisos financieros, gastando menos a cambio de más satisfacción. Suscríbete al canal si eres nuevo aquí y síguenos!