¡No nací para esto!

¡Hola! Seiiti Arata. ¿Sabes cuando estás insatisfecho con algo y aparece una voz dentro de ti gritando «no nací para esto¨? Esta voz suele aparecer cuando estás caminando hacia una dirección diferente a tu propósito. El grito interno «yo no nací para esto» es un recordatorio de cuál es tu propósito. Cuando te quedas indignado con lo que estás haciendo, está pasando algo de mala manera y estás pidiendo un cambio. Es buen momento para que reevalúes tus acciones, sentimientos y pensamientos. ¿Qué hacer al respecto?

1.Mejora tus pensamientos para mejorar tus sentimientos.

Cuando sientes que no naciste para hacer aquella actividad ingrata, se está siendo necesario cambiar el tipo de actividad, cambiar las decisiones que nos llevaron hasta aquella situación. Y para mejorar la calidad de nuestras decisiones, necesitamos entender cómo se toman las decisiones.

Existe un orden natural de las cosas: primero tenemos un pensamiento, o una idea. Luego, surge una emoción, un sentimiento correspondiente a esta idea.

¿Qué significa esto? Piensa en aquellos días en que dices que no te siente motivado. O en los días que te sientes ansioso. O bien, en los días en que te siente desorganizado. Todos estos sentimientos surgieron después de una serie de pensamientos e ideas de baja calidad. Es decir, para comprender nuestro estado emocional, necesitamos entender lo que está detrás de éste. ¿Cuáles son los tipos de ideas y diálogos internos que estamos produciendo?

Por lo tanto, la lección práctica es: identifica los sentimientos indeseados que experimentas durante tu día. Después, dedica esfuerzos para cambiar tus pensamientos y tu forma de pensar. Mejora la calidad de tus ideas.

ENFOQUE - Seiiti Arata, Arata Academy

2. Mejora tus sentimientos para mejorar tus acciones.

Nuestras acciones tienen lugar cuando surgen sentimientos que nos motivan.

Por ejemplo, una pareja que se acercan por primera vez son motivados por una serie de sentimientos. Sienten una voluntad de conectarse. Tienen curiosidad por el otro, o alguna atracción hasta ahora inexplicable.

Del mismo modo, una pareja que se separa es movida por diversos sentimientos. Pueden estar frustrados uno con el otro. Una de las partes puede no sentirse comprendida por la otra. O bien, simplemente quieren buscar algo nuevo.

Otro ejemplo: Es aquel joven emprendedor que abre una empresa propia y está motivado por los sentimientos de creatividad. También puede estar sintiendo la necesidad de probar para sí mismo, que es capaz. O bien, él está buscando su independencia financiera.

Bueno, percibe la secuencia: Un pensamiento de calidad nos conduce hacia un sentimiento de calidad. Este sentimiento de calidad nos lleva a realizar acciones de calidad. Luego, si practicamos acciones de calidad, tendremos resultados de calidad.

Cuando estas acciones se repiten, se van transformando en hábito. Cuando deliberadamente construyes los hábitos que te ayudan, tiene un nombre: es desarrollo personal. Acabamos de crear un nuevo curso que te guiará en cada uno de los pasos para este proceso y voy a pasarte el enlace al final de este vídeo. Sigue acá conmigo hasta el final para saber más detalles.

El proceso de desarrollo personal es muy importante y puede determinar nuestro futuro. El buen hábito es aquel construido de manera intencional. Es decir, existe conciencia detrás del hábito. Razonas antes de establecer un nuevo hábito. ¿Y por qué estoy siempre enfatizando la importancia de los hábitos? Porque una sola acción difícilmente tendrá impactos verdaderos en tu vida.

Por otro lado, constantemente repetir acciones crean hábitos. Y los hábitos te ayudan a tener grandes resultados.

Desarrollo personal: la manera inteligente de construir nuestra vida.

3. Queremos crear conciencia de nuestra creación de hábitos.

Deseamos evitar vivir la vida en piloto automático. No queremos estar repitiendo actitudes que no son coherentes con lo que deseamos construir para nuestro futuro. ¿Cuál es el problema de no tener conciencia acerca de nuestros propios hábitos? Es vivir como un zombi. Es hacer las cosas sin razonar.

Las personas que viven en automático tienen un problema grave. Siempre están repitiendo las mismas actitudes – y probablemente esperando resultados diferentes. Es posible que no recuerden cómo, o porque, siempre están tomando las mismas decisiones.

¿Y qué es lo que deseamos? Queremos reflexionar acerca del camino que deseamos seguir. Queremos utilizar nuestra conciencia para determinar cuáles son los hábitos que nos van a ayudar. Estamos buscando acciones y decisiones que serán repetidas conscientemente. Acciones y decisiones que se transformarán en hábitos positivos.

Y también queremos eliminar los hábitos negativos que nos están obstaculizando el ser quienes deseamos ser.

ENFOQUE - Seiiti Arata, Arata Academy

4. Sé la persona que naciste para ser.

Finalmente, llegamos al punto más importante de este vídeo. Tu sabes exactamente cuál tipo de persona naciste para ser. Sé honesto contigo mismo. No te decepciones tú mismo.

No queremos vivir una vida incoherente con nuestros propósitos. Si aceptamos cualquier cosa que no forma parte de nuestro camino, va a existir aquella voz que dice: yo no nací para esto.

Esta voz lleva una gran verdad. ¡Cuando sientas esa voz, aprovecha ese momento! Sé sincero contigo mismo: ¿cuál es el tipo de persona que naciste para ser? ¿Qué es lo que realmente quieres para ti?

Ten mucha claridad sobre cual tipo de personas naciste para ser. Esto te garantizará más determinación y garras para hacer lo que se necesita hacer. Para que trabajes las horas que sean necesarias. Para leer los libros que serán necesarios. Para hacer los entrenamientos necesarios. Y especialmente en decir no a las cosas que no contribuyen con tu vida.

Esta claridad te guiará. Tus pensamientos, tus sentimientos, tus acciones. De esta forma vas construyendo hábitos de forma consciente, en dirección a la persona que naciste para ser.

Es muy importante que también tengas humildad para aceptar todos los pasos a lo largo de tu camino. Imagina, por ejemplo, que deseas ser director de una gran empresa. Para esto, es natural que tengas que pasar por todo un proceso de entrenamiento. Tendrás que estudiar, ser pasante y realizar tareas banales y repetitivas. Probablemente, para destacar, tendrás que trabajar mejor que el promedio. Tendrás que mostrar que tienes interés en ser efectivo, ¿entiendes?

De esta forma, combinando talento, esfuerzo, inteligencia y humildad, estarás en el camino para llegar hasta la dirección.

Continuando con el ejemplo, será improductivo si cultivas las actitudes de un aprendiz o de un recién graduado impaciente y arrogante. Una persona sin noción del mundo, que no acepta hacer actividades más simples, que vive diciendo que no nació para aquello …

Necesitas un equilibrio apacible. Desea combinar la osadía para tener sueños grandes con la humildad y la dedicación para recorrer el camino y pagar el precio necesario. El mal del siglo es querer algo a cambio de nada. No seas esa persona.

Para que puedas conocer nuestro nuevo curso, Desarrollo Personal, visita el enlace.